Vaya lío! y, me refiero a la que se ha montado con las estrictas medidas tomadas por Pasarela Cibeles con respecto a la horrible enfermedad de la anorexia.
Modelos hiperdelgadas, modelos con celulitis, feas y guapas, también chicas enganchadas a cosas nada recomendables para la salud y adiseñadores obsesionados con sacar chicas adolescentes en sus pasarelas pero lo que nunca había visto era denigrarlas hasta tal punto de subirlas en una báscula para acceder a un puesto de trabajo.
No me parece justo poner a nadie encima de un peso para saber si reune las condiciones necesarias para desfilar. Pienso que existen otras formas de ver si una modelo está en condiciones de subirse a una pasarela como obligar a todos los diseñadores a confeccionar una talla 38 real y comprobar a qué modelo le sienta bien y a quién no. Con algo tan sencillo como esto sería más que suficiente.
La anorexia es una enfermedad que salta a la vista y me explico. Hay chicas que por su constitución son así, es decir, atléticas por naturaleza y a pesar de comer lo que les apetece continúan con unos cuerpos estupendos y os pondré como ejemplo a algunas tops internacionales como Eugenia Silva, Gisele Bündchen o Carmen Kass. Sí, de acuerdo, están delgadas pero os puedo asegurar que he trabajado un montón de veces con ellas y las chicas comen y muy bien. Otra cosa es que se cuiden y eviten lo que le engorda a todo el mundo, o sea, las grasas, el chocolate, el pan en grandes dosis y cosas así.
Eugenia es una de las que ha abandonado Pasarela Cibeles negándose a someterse a la prueba de la báscula. Pero ha habido muchas más que también lo han hecho. La verdad, estoy deseando que llegue mañana, lunes 18 de septiembre para ver el primer desfile, el de Antonio Pernas y ver el casting definitivo. Por fin veré lo que signfica tener un 18 de masa corporal.
De lo que sí deberían preocuparse los diseñadores y los responsables de la Pasarela es que sólo desfilen chicas mayores de edad y no de 15 años como hemos visto en alguna ocasión. Estas niñas modelos son normalmente las más delgadas y no es porque padezcan la enfermedad de la anorexia sino porque aún no están formadas del todo como mujeres. Y creo que no hablo de nada raro. Una cosa es haberse desarrollado, o sea, haber tenido la menstruación y otra ir cogiendo formas y curvas lógicas que se adquieren sólo con el paso del tiempo.
Sinceramente no me creo que en Milán, Nueva York y París vayan a poner una báscula para que Naomi Campbell, Eugenia Volodina o Natalia Vodianova se pesen antes de salir a la pasarela. ¿Qué piensan ustedes?